Salmonfest
En el año del bicentenario de la patria, y en el décimo aniversario del disco El Salmón, surge el Salmonfest, una fiesta que celebra la épica cancionera gestada por Calamaro que, encerrado en domésticos estudios de grabación, con la compañía del Cuino Scornik, compuso y grabó, sin ningún tipo de condicionamientos, cerca de 300 canciones en apenas tres meses.
20 ago 2010
Calamaro en Babilonia (nombre anterior del Uniclub)
Una crónica sobre tres recitales de Calamaro, uno en Babilonia, otro en Cemento y otro en Ciudad
Entonces el Joven Faisán y sus amigos van con una extraña euforia a ver al Joven Calamaro a Babilonia. Son los días heroicos de Nadie sale vivo de aquí y ver a Calamaro es una de las obligaciones ineludibles del joven estudiante de comunicación social con vocación rockera. Es ver al artista del año pasado tocando el mejor disco del año pasado. El que ganó la encuesta del Sí de 1989 y el que no vendió casi nada pero todos se lo grabaron. El mejor disco de la era del fin del vinilo.
Babilonia está a full, guarda viejita que acá todos compiten por ser el más rocker. Hay famosos pero Faisán y sus amigos sólo se fijan en las famosas de esa noche, la hija de Berugo Carámbula y una morocha que se llama Lara y sale con Lalo Mir y tiene un orto como para pedir turno con meses de anticipación. Se piden una cerveza que pagan y toman entre los tres y suben corriendo al piso donde está el escenario, no hay ni 200 personas pero parece que fueran mucho más. El Joven Faisán se come una manzana mietras mira al Joven Calamaro, que parece muy en pedo pero logra mantener una pose desafiante. Sabe que la lista de temas de esa noche es invencible: Pasemos a otro tema, Adiós amigos adiós, No tengo tiempo, Sábado a la noche de Moris, Señal que te he perdido, Loco por ti, Vietnam y Dos Romeos, si no toca Dos Romeos se lo comen crudo.
Bueno, por ahí exagero, pero esa noche y después otra en el Arlequines parecía que todos formaban parte de la misma conspiración, una especia de resistencia, no parecía haber enemigos ahí afuera, no se los reconocía, pero se sabía que en el país estaba todo mal y sin embargo estaba todo bien, el turco recién llegaba y no entendíamos lo que se venía, pero se venía...
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